jueves, 26 de enero de 2012

Veraneante

Hoy el veraneante me dijo que el verano viene malo. Yo miré las nubes, el agua... el otro día hubo tormenta pero eso no es malo. No. Es que el veraneante y sus vecinos no han conseguido alquilar sus casas a otros veraneantes.

Veraneante:

Si te sacaras tus lentes de sol verías el color de la vida. Verías que el verano no descansa, que las aves vuelan libres, pero no paran de buscar alimento. Que las olas continúan su trajín desconociendo feriados. Si dejaras el whisky podrías bajar tu barriga para poder trepar la duna. Si te sacaras ese aparato de tus oídos escucharías el canto de las piedras. Si supieras que te conviertes en lo que comes no serías tan papa frita. Mira a tu alrededor, todo es armonía y movimiento. Solo tú desentonas, escudando bajo el protector solar tu color tubo luz de oficina. Tienes dos casas, y en ambas vive el miedo. Me ves y me dices qué suerte tú, que vives en este lugar tan bonito. Pues te digo, veraneante, la naturaleza no es bonita, simplemente es.

martes, 24 de enero de 2012

Seminario: Poética de la realidad


Documental de creación, o poética de la realidad. (Ética y estética para la liberación)


El documental de creación es un equilibrista que marcha sobre la difusa línea entre la realidad y la imaginación. Las ideas deben volar pero a una justa altura de vuelo. Una desviación hacia uno u otro lado significaría la invasión de terrenos vecinos y el abandono del propio al documental de creación. El documental de creación se emparenta con las artesanía; un alfarero puede dar rienda suelta a su creatividad, explorar nuevas formas y materiales, pero jamás debe abandonar la esencia de su cántaro que es la de contener agua. Por herencia de los primeros tiempos del documental, y al que debe su carácter de documento, este género ha devenido en el imaginario como prueba de la verdad. La contraposición de esta cualidad con la de su crítica ha abierto una brecha de duda. Por esa brecha es que se cuela el documental de creación.

Verdad, imaginación, duda, son piedras angulares del documental de creación. Estas tres palabras forman el reducido ramillete de estudio de la filosofía: el problema del hombre. El documental de creación se alimenta directamente de la filosofía. Es el amor a la sabiduría expresado cinematográficamente.


Seminario

Mientras el mundo avanza vertiginoso, los documentalistas hacemos una pausa de serenidad. Apostamos pacientes a edificar sobre el único terreno imposible de expropiar: las ideas. Este seminario es una propuesta a pensar juntos el problema del documental de creación, que es el problema de la creación en el documental. Así como la ausencia de crítica se degenera en esclavitud mental, un cine documental comprometido con la ética y la estética es un camino que conduce hacia la libertad. Atahualpa Yupanqui lo dijo así: "El poeta debe ponerle alas a los sueños de la gente".



Documental de creación, o poética de la realidad. (Ética y estética para la liberación)


Seminario de tres módulos


Módulo 1

Qué es es documental. Qué es el documental de creación. El documentalista como artista.


Módulo 2

Qué es la poesía. Qué es la realidad. La memoria.


Módulo 3

Qué es la ética. Qué es la estética. Compromiso. Arte y política. El arte como forma de liberación.

sábado, 14 de enero de 2012

A la deriva

Existe un ejercicio que demuestra la influencia de lo audiovisual en el desarrollo de la personalidad. Se le indica a una persona o gupo que retroceda mentalmente en el tiempo e intente ubicar la imagen cinematográfica que recuerde haber visto más tempranamente, la más lejana. Debe ser una imagen en movimiento, película, noticiero, dibujos animados, lo que sea, pero vista en una pantalla en movimiento. Luego se procede al comentario de la experiencia. Son siempre numerosas las coincidencias y descubrimientos de los participantes, lo que lo torna un ejercicio colectivo gratificante. Por último, el moderador pide que cada participante trate de explicar lo que ha sido su vida de acuerdo a la imagen recordada. Esta parte del ejercicio es una tarea a llevar a casa y puede llevar mucho tiempo de análisis.

La pantalla de televisión ha venido a ocupar el tradicional puesto del narrador alrededor del fuego. En el mundo del vértigo no queda tiempo para sentarnos a contar historias a nuestro hijos y delegamos la tarea al televisor. Si un día nos atrevemos a hablar, vemos que hemos perdido la capacidad de captar el interés. Somos incapaces de crear un clima propicio y desistimos ante la menor interrupción. El empobrecimiento del lenguaje nos conduce al desvanecimiento de las ideas. Es imposible competir con la televisión, con contadores profesionales. Así, solo creemos pertinente hablar cuando durante el día hemos sido testigos de algún accidente sangriento o un robo, esperando despertar la ilusión de los pequeños que piensan "papá es un héroe". Es triste pero hemos sido vencidos por la televisión. Y hasta la propia tv ha sido derrotada por ella misma. Hasta hace un par de décadas el material que llegaba a nuestros televisores eran historias al menos correctamente contadas. Películas, seriales y telenovelas ocupaban normalmente el horario central de los canales. Pero los guionistas y realizadores de esas películas también tuvieron hijos, quienes también fueron desatendidos. Esos hijos hoy mayores son los que están al frente de lo que se produce en el presente. La propia pobreza de mi lenguaje me limita la definición del tipo de programas que dominan la grilla. Quizás lo más acertado sería decir que el narrador ha sido suplantado por un vendedor. Así como el contador de cuentos de rueda de fogón devino en guionista, éste se convirtió en creativo publicitario. Nuestra sociedad es un barco a la deriva timoneada por creativos publicitarios.

miércoles, 11 de enero de 2012

La historia de las historias

Acertado estuvo el idioma inglés en asignar palabras distintas a dos conceptos bien diferentes: story, a una historia  narrada, y history, al acontecer de los hechos a lo largo del tiempo. La riqueza histórica de un pueblo no necesariamente  conlleva a riqueza de historias, entendidas las mismas como narración. La Historia (con mayúscula), a la vez de avanzar  indefinidamente, se abre hacia los lados como la copa de un árbol en tantas ramas como curiosidad tenga quien la  observe. La historia o narración, por su parte, se gesta durante la navegación del investigador por el ramaje de la Historia. Se descubre así que cada quiebre y bifurcación de los hechos es totalmente lógico. La originalidad de la nueva hoja de  ruta ensayada depende exclusivamente de la intuición y la creatividad del investigador. Así, la Historia (history), siempre objetiva y repelente a deseos e interpretaciones posteriores, está pronta a convertirse en una historia (story). Para eso  solamente resta un paso: transmitirla. La forma que adopte se amoldará al medio escogido (generalmente artístico). La  cultura de un pueblo no está dada por la historia que le ha tocado vivir, sino por la fascinación que la misma produce en sus hombres. Los artistas se descubren a sí mismos en infinitos aconteceres de la vida y logran transmitirlo al resto de los  hombres. Mientras exista alguien contando una historia existirá cultura. La historia pertenece a la naturaleza, las historias  al hombre.

El triunfo del arte

Hurgando por la antigüedad clásica, y a propósito del papel de la

filosofía como detonante clave de la caída de Grecia, me topé con la

siguiente frase: "En buena medida, el patriotismo cedía el paso al

individualismo, lo que significaba al mismo tiempo que la mente humana

alcanzaba nuevas cumbres en el ámbito del espíritu... Estado y

civilización perdieron su unidad tradicional, y eso hizo posible que

quienes no eran griegos aceptaran la civilización griega como la

civilización de la humanidad". El desarrollo del pensamiento conduce

al aniquilamiento del estado, ya sea interno o por fuerzas "bárbaras"

del exterior. Pero el invasor tampoco permanece impermeable a la

cultura/civilización de su invadido. Tal es el derrotero de la

cultura, tempestuoso pero destinado a la victoria. Como afirma Sábato,

el filósofo descubre los problemas del hombre, pero es el poeta quien

los traduce a un idioma entendible. Detrás de un artista debe estar

siempre el filósofo, y no necesariamente al revés. El poder bien sabe

que el pensamiento es el arma más poderosa y por eso pretende

comprarla. La cultura oficialista resulta tan falsa y repugnante como

aquella que se le opone. No existe ninguna balanza a equilibrar:

trabajamos los artistas para equilibrar algo? ¿O lo hacemos para dar

rienda suelta a nuestra esencia? El arte es simplemente el ejercicio

de la libertad. Quien pretenda plantar lucha desde el arte estará

trabajando para el enemigo.